Luego del Génesis, del cual hemos dicho que contiene pasajes fraudulentos, y que nunca pudo haber sido escrito por Moisés, el libro de Daniel es uno de los libros más importantes del Antiguo Testamento para los cristianos conservadores, pues para ellos contienen las profecías del segundo advenimiento de Cristo.
Las profecías están basadas en el sueño del Rey Nabucodonosor y el sueño que tuvo Daniel sobre cuatro bestias que subían del mar. Los cristianos conservadores afirman que Daniel fue capturado por los Babilónicos cerca del año 605 A.C., y escribió su libro cerca del año 540 A.C.
Por otro lado, los cristianos liberales rechazan que el libro de Daniel haya sido escrito por Daniel. Afirman que fue escrito por alguien desconocido cerca del año 169 A.C. Su contenido está basado en historias oralmente trasmitidas desde el tiempo del exilio babilónico hasta el siglo segundo A.C.
Las cuatro bestias en el sueño de Daniel, narradas en el Capitulo 7 se refieren a cuatro civilizaciones, a saber, (1) el imperio neo-babilónico de Nabucodonosor (2) el imperio Meda (3) el imperio de Persia (4) el imperio Selacio.
Por lo tanto, siendo que el libro de Daniel fue escrito luego del levantamiento del imperio final, quienquiera haya sido su autor, no escribió profecía alguna del futuro, sino que narró eventos históricos pasados.
Los predicadores conservadores de hoy, como lo han hecho en el pasado, continúan engañando la audiencia que les escucha, con sermones eufóricos del segundo regreso de Cristo y del fin del mundo. Unos por su ignorancia y otros porque se aprovechan de la ignorancia de su audiencia.
En resumen, el Libro de Daniel no tiene ningún significado para el día de hoy, siglo XX1, solamente para aquellos que ignoran la historia, se aferran a una religión dogmática y perpetúan su fe en “profecías” que nunca serán cumplidas.